La Verdad 19/9/05 La planta de pollos asados que causó miles de casos de salmonelosis volverá a abrir en menos de un mes
COLPISA/TOLEDO
La planta de elaboración de pollos asados precocinados que la empresa Sada posee en Lominchar (Toledo) y que este verano causó más de 2.800 casos de salmonelosis en toda España -uno de ellos mortal en la persona de un anciano de Valencia- reanudará su actividad en menos de un mes. En la Región de Murcia fueron 267 las personas intoxicadas, muchas de ellas inmigrantes que no tuvieron noticia de la alerta sanitaria.
La reapertura de la actividad será posible tras realizar las modificaciones ordenadas por la Consejería de Sanidad de Castilla-La Mancha en las tuberías que dosificaban la salsa que recubría los pollos, que es donde se detectó el origen de la salmonela causante de la intoxicación, ya que estas tuberías no se limpiaban.
En la última reunión mantenida entre la dirección de esta empresa y los representantes de los más de 200 trabajadores de esta fábrica se les ha comunicado que la línea de producción de los pollos asados volverá a funcionar «a finales de este mes o a mediados de octubre como muy tarde», según confirmó el presidente del comité de empresa de esta factoría, Paulino Navarro. «Nos han dicho que sólo nos dediquemos a trabajar y que evitemos las habladurías porque ellos lo asumirían todo», añadió el representante de los trabajadores en alusión a la sanción que la Consejería de Sanidad impondrá a esta empresa por la intoxicación causada: algo más de 600.000 euros. Desde que el pasado 28 de julio se paralizara la elaboración de pollos asados precocinados de las marcas Sada y Pimpollo en esta fábrica, los trabajadores encargados de esta línea de producción han pasado a ocuparse de otros departamentos de comida precocinada en esta factoría, inaugurada en noviembre de 2004.
Fuerte multa
En la actualidad, la dirección de Sada está a la espera de que la Consejería de Sanidad le comunique oficialmente la sanción económica que deberá pagar tras las conclusiones del expediente administrativo abierto a raíz de la intoxicación. Según este expediente, Sada incurrió en una falta muy grave por poner en el mercado productos destinados a consumo humano contaminados con salmonela y una falta grave por no haber comunicado a los servicios de inspección de la Junta de Castilla-La Mancha tanto la modificación que acometió en la estructura empleada para el suministro de la salsa origen de la salmonela como la variación de los componentes de esta salsa. Estos cambios derivaron en una «merma del control higiénico del producto que generó la aparición de la salmonela y la consecuente toxiinfección alimentaria», según concluyó el informe del expediente abierto.
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